Algunos familiares de internos del Centro de Reinserción Social (Cereso) de Cholula, exigieron a las autoridades estatales la destitución de la subdirectora de este inmueble, María Dolores Muñoz, por suspender los talleres y actividades al aire libre y mantener hasta 14 internos en sus celdas, aún cuando debe evitarse el hacinamiento en las áreas por la contingencia sanitaria del Covid-19.
También acusaron a la funcionaria, de aparentemente ejercer actos de hostigamiento contra algunos internos y dar “preferencias” a otros.
Agobiados por la situación, el grupo de declarantes ventiló a este medio de comunicación, que tras la llegada de esta funcionaria, -aproximadamente hace dos semanas- en el penal se han dado cambios que afectan a la comunidad penitenciaria y hasta ellos, como visitantes.
“Realmente ya la situación es muy difícil porque los internos ya se sienten más estresados, a parte del encierro que tienen, porque ya no los dejan tener actividades, incluso el domingo pasado intentó uno escaparse por el área de población, además sólo les permite bañarse con agua fría, pero de ahí ya no salen, porque ya no les permite hacer nada y también en el reclusorio ya no hay comida, porque como familiares ya les tenemos que llevar, ya les dan una miseria y pues lo que nosotros exigimos es su destitución porque ella hace esto, porque dice tener el apoyo de su esposo Leopoldo Morales, que según trabaja en el área operativa de la Dirección de Ceresos”, externaron.
Tras pedir el anonimato, por temor a que familiares sufran represalias, agregaron que además la subdirectora quiere implementar regímenes más estrictos en el tema de las visitas familiares, porque ahora el personal de custodia es más prepotente y hasta te obliga a permanecer más de dos horas en la fila de ingreso, para que al final, no permiten la entrada bajo el
argumento de que algún alimento o artículo no está autorizado.
“Ya los internos ni siquiera tienen agua, tienen que tomar agua del inodoro, y además todavía hay celdas de castigo en este inmueble y sabemos que hay muchos que están convulsionando o desmayándose porque no aguantan el encierro y pues queremos queremos que nuestros familiares tengan trato digno, sabemos que están ahí para pagar algo que no hicieron bien, pero no es motivo para que los traten como animales”, comentaron.
Finalmente, los entrevistados pidieron a las dependencias correspondientes terminar con los presuntos actos de corrupción que también tienen lugar en este recinto, porque sigue el aparente cobro de cuotas por tener derecho a una visita familiar, para ver televisión y tener otras comodidades.