Tal parece que otro de los sellos del barbosismo y la LX legislatura poblana será la elección “democrática” de los titulares de órganos “descentralizados” del Gobierno del Estado, mismos que en el día a día resultan útiles si algún tema se complica.
Y es que basta ver los procesos para elegir a los titulares de la Comisión Estatal de Derechos Humanos y del Auditoria Superior del Estado, en los que surgieron listas abundantes de participantes para estos encargos, pero que cerraron con más de un inconforme por el curso que siguieron los mismos.
Pues de pronto se evaluaron puntos que las convocatorias no explicaron claramente, al grado que uno de los peores evaluados en otros rubros, terminó siendo el titular de uno de estos organismos, pues los integrantes del Congreso de Estado tuvieron a bien darle una “ayudadita” en los rasgos cualitativos para alcanzar el encargo y no era para menos pues todo lleva a que es familiar de una de las personas más cercanas a Luis Miguel Barbosa.
Y como dejar de lado la reciente abatida de la ASE en contra de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, por una ruptura, que a todas luces se nota, en la relación entre el rector de la máxima casa de estudios y el gobernador del estado.
Pero esos son temas que pasan a segundo plano ahora que surgió la convocatoria para la renovación del titular de la Fiscalía General del Estado tras la renuncia de Víctor Carrancá, quién ya no desempeñaba el cargo pero legalmente lo era.
Y es que contrario a lo que muchos podrían pensar, Gilberto Higuera daría continuidad a su labor al frente de la dependencia, pues haciendo matemáticas del tema, son dieciséis los suspirantes inscritos para este encargo, pero pensando con la cabeza fría, el actual encargado de despacho, pese a haber ocupado el puesto desde finales de la administración de José Antonio Gali, ha congeniado con el grupo en el poder, tanto a la hora de rendir cuentas ante el legislativo, como a la hora de trabajar de la mano con el gobierno estatal.
Si la fórmula no falla y se repite el proceso como en las anteriores designaciones, quince aspirantes saldrían sobrando en esta convocatoria, pues el ganador ya estaría ungido desde Casa Aguayo y en las curules del congreso local.
Cabe reconocer que contrario a la labor de Víctor Carrancá, con Higuera Bernal se ha visto un una mejor cara de la Fiscalía General del Estado, con resultados más cuantificables, sin dejar de mencionar que ahora la dependencia tiene un rostro, mismo del que años atrás carecía cuando de buscar una respuesta se trataba.
Es de resaltar también que entre los soñadores a ocupar esa silla, se encuentra la Mtra. Rosa Celia Pérez González, quien ha figurado en algunas notas periodísticas recientemente, pues ella fue la jueza que dictó prisión preventiva a la periodista Lydia Cacho durante aquel escándalo del “gober precioso”, mismo por el cual el ex mandatario poblano cuenta actualmente con una orden de aprehensión en su contra, lo que en mi particular opinión le daría a la contendiente puntos en contra en su búsqueda por ser Fiscal General del Estado.
Habrá que estar pendientes de las novedades que surjan tanto en el Poder Legislativo como en el Poder Ejecutivo en torno a esta designación que, contraria a las dos anteriores, podría ser un acierto para la entidad, pues como ya mencioné se ha visto un trabajo diferente en el edificio del Boulevard 5 de Mayo, esquina con la 31 Oriente ya que si algo necesitamos en Puebla son resultados contundentes y no compadrazgos ni pagos de favores políticos.
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