/ martes 2 de octubre de 2018

Juicio por daño moral. La caída del sistema

Para Dulce María Silva Hernández y César Yáñez Centeno.

Deseándoles una felicidad eterna.

Sinceramente.


Hoy presento a ustedes el libro que después de innumerables reuniones, análisis, estudios, investigaciones, con el autor de la obra cuyo título lleva el de esta entrega, finalmente y después de más de un año vio la vida y salió a la venta en las principales librerías del país, precisamente unos días antes de la elección en la que se alzara con el triunfo Andrés Manuel López Obrador y, por fin, lograra convertirse en el próximo presidente del País para beneplácito de los mexicanos, me refiero a la obra “Juicio por Daño Moral. La caída del sistema”, escrito por Manuel Bartlett Díaz, amigo, maestro y mentor de quien esto escribe, con la colaboración César Alejandro Hernández: investigación, análisis de las pruebas, redacción de borradores. Xchel Óscar Arias Jiménez: apoyó en investigación hemerográfica. David Carmona Sánchez: colaboración en la investigación y análisis de las resoluciones que conformaron el Juicio por Daño Moral.

El libro consta de dos partes: la primera se concreta al estudio puntual de lo que trajo como consecuencia la creación del eslogan “La caída del sistema” y con ello dejar vivo al chivo expiatorio como lo narra de manera clara y concisa el Doctor Luis G. Benavides Ilizaliturri. La segunda parte, escrita por el suscrito y que consiste en la investigación y análisis de las nueve resoluciones que conformaron el Juicio por Daño Moral, que promoviera Manuel Bartlett en contra de Germán Martínez y, en la cual, demostramos de manera indubitable el cúmulo de errores jurídicos y zafias actitudes procesales que tuvo que afrontar Bartlett Díaz en aquel sinuoso camino judicial en el que finalmente se acredita la intromisión del entonces Presidente Felipe Calderón y sus adláteres, con la única intención de mantener viva la frase “caída del sistema”, acuñada por el inefable Diego Fernández de Ceballos, y así continuar con la satanización en el desempeño de Manuel Bartlett como secretario de Gobernación en aquel 1988 y que hoy, mantienen viva algunos trasnochados periodistas y el colectivo nacional.

Bartlett Díaz sobre la obra expresa: “…Este libro no es un acto de autorrecuperación. Es el ejercicio de mi derecho a defender mi patrimonio moral. Es una denuncia contra quienes, presos de la necesidad de ocultar sus tradiciones ideológicas y su complicidad, se mueven impulsados en cualquier circunstancia para mantener vivo, a toda costa, al “chivo expiatorio”.

Es un testimonio razonado, documentado y analítico de supuestas “pruebas”; muestra las características de autores, palabras, nombres y personajes que han intervenido en esta historia de treinta años.

En suma, este libro es un esfuerzo comprometido con la verdad para esclarecer los hechos de mi historia personal, que se entreteje con la historia política de nuestro país…”.

En efecto, como lo dijera el autor de la obra, se trata de un esfuerzo comprometido con la verdad, y así, contrasta los argumentos de sus detractores políticos con lo expresado por Miguel de la Madrid en sus memorias “Cambio de rumbo. Testimonio de una Presidencia”, edición 2004”, haciendo un comparativo de lo que el entonces Presidente de México vivió en las cuestionadas elecciones presidenciales momento a momento, con lo que Bartlett demuestra que, la atribución de la mítica caída del sistema, no es más que una filfa que sigue arrastrando el próximo director de CFE de manera injusta, desproporcionada y por la ignorancia supina de quienes siguen atribuyéndole aquel acto que nunca se dio, y que culminó con la supuesta caída de un sistema electoral, “para favorecer a Salinas”.

La parte jurídica que correspondió al que esto escribe, recoge los argumentos vertidos en nueve sentencias, desde que se entabló la litis, hasta el fallo pronunciado por la primera sala de nuestro máximo tribunal de justicia en el país, pasando por la ejecutoria de ocho ministros de la Corte que le conceden toda la razón a Bartlett Díaz, y en la que los integrantes de la Primera Sala, ex post, cantan la palinodia, exonerando a Martínez Cázares del daño moral causado al ex senador de la República, por las ofensas y acusaciones que el entonces diputado federal Germán Martínez hiciera en su calidad de representante de Acción Nacional ante el entonces IFE, al tiempo de ser uno de los hombres más cercanos del responsable de la irrefrenable violencia y desmedido crecimiento del narcotráfico de este México ensangrentado (Felipe Calderón), entonces, aprovecho este espacio para invitar a mis lectores para hacerse del libro que aquí describo, con el cual Bartlett Díaz y sus colaboradores demostramos que la responsabilidad que se le atribuye como autor de “la caída del sistema” es una burda falacia, en la que los intereses perversos de Salinas de Gortari, Felipe Calderón y Diego Fernández de Ceballos fueron determinantes, y así, hacer que el chivo expiatorio siguiera vivo.

En breve, acompañaré en distintos foros a Manuel Bartlett Díaz para hablar de la obra en la que el autor se referirá a la primera parte del libro, y yo haré lo propio por lo que hace a las inverosímiles resoluciones que exoneran al responsable de causar daño moral a su persona, con un cúmulo de pruebas de naturaleza técnico-jurídica que harán flipar a nuestros futuros escuchas. ¡Abur!

mezavcm.abogados@gmail.com


Para Dulce María Silva Hernández y César Yáñez Centeno.

Deseándoles una felicidad eterna.

Sinceramente.


Hoy presento a ustedes el libro que después de innumerables reuniones, análisis, estudios, investigaciones, con el autor de la obra cuyo título lleva el de esta entrega, finalmente y después de más de un año vio la vida y salió a la venta en las principales librerías del país, precisamente unos días antes de la elección en la que se alzara con el triunfo Andrés Manuel López Obrador y, por fin, lograra convertirse en el próximo presidente del País para beneplácito de los mexicanos, me refiero a la obra “Juicio por Daño Moral. La caída del sistema”, escrito por Manuel Bartlett Díaz, amigo, maestro y mentor de quien esto escribe, con la colaboración César Alejandro Hernández: investigación, análisis de las pruebas, redacción de borradores. Xchel Óscar Arias Jiménez: apoyó en investigación hemerográfica. David Carmona Sánchez: colaboración en la investigación y análisis de las resoluciones que conformaron el Juicio por Daño Moral.

El libro consta de dos partes: la primera se concreta al estudio puntual de lo que trajo como consecuencia la creación del eslogan “La caída del sistema” y con ello dejar vivo al chivo expiatorio como lo narra de manera clara y concisa el Doctor Luis G. Benavides Ilizaliturri. La segunda parte, escrita por el suscrito y que consiste en la investigación y análisis de las nueve resoluciones que conformaron el Juicio por Daño Moral, que promoviera Manuel Bartlett en contra de Germán Martínez y, en la cual, demostramos de manera indubitable el cúmulo de errores jurídicos y zafias actitudes procesales que tuvo que afrontar Bartlett Díaz en aquel sinuoso camino judicial en el que finalmente se acredita la intromisión del entonces Presidente Felipe Calderón y sus adláteres, con la única intención de mantener viva la frase “caída del sistema”, acuñada por el inefable Diego Fernández de Ceballos, y así continuar con la satanización en el desempeño de Manuel Bartlett como secretario de Gobernación en aquel 1988 y que hoy, mantienen viva algunos trasnochados periodistas y el colectivo nacional.

Bartlett Díaz sobre la obra expresa: “…Este libro no es un acto de autorrecuperación. Es el ejercicio de mi derecho a defender mi patrimonio moral. Es una denuncia contra quienes, presos de la necesidad de ocultar sus tradiciones ideológicas y su complicidad, se mueven impulsados en cualquier circunstancia para mantener vivo, a toda costa, al “chivo expiatorio”.

Es un testimonio razonado, documentado y analítico de supuestas “pruebas”; muestra las características de autores, palabras, nombres y personajes que han intervenido en esta historia de treinta años.

En suma, este libro es un esfuerzo comprometido con la verdad para esclarecer los hechos de mi historia personal, que se entreteje con la historia política de nuestro país…”.

En efecto, como lo dijera el autor de la obra, se trata de un esfuerzo comprometido con la verdad, y así, contrasta los argumentos de sus detractores políticos con lo expresado por Miguel de la Madrid en sus memorias “Cambio de rumbo. Testimonio de una Presidencia”, edición 2004”, haciendo un comparativo de lo que el entonces Presidente de México vivió en las cuestionadas elecciones presidenciales momento a momento, con lo que Bartlett demuestra que, la atribución de la mítica caída del sistema, no es más que una filfa que sigue arrastrando el próximo director de CFE de manera injusta, desproporcionada y por la ignorancia supina de quienes siguen atribuyéndole aquel acto que nunca se dio, y que culminó con la supuesta caída de un sistema electoral, “para favorecer a Salinas”.

La parte jurídica que correspondió al que esto escribe, recoge los argumentos vertidos en nueve sentencias, desde que se entabló la litis, hasta el fallo pronunciado por la primera sala de nuestro máximo tribunal de justicia en el país, pasando por la ejecutoria de ocho ministros de la Corte que le conceden toda la razón a Bartlett Díaz, y en la que los integrantes de la Primera Sala, ex post, cantan la palinodia, exonerando a Martínez Cázares del daño moral causado al ex senador de la República, por las ofensas y acusaciones que el entonces diputado federal Germán Martínez hiciera en su calidad de representante de Acción Nacional ante el entonces IFE, al tiempo de ser uno de los hombres más cercanos del responsable de la irrefrenable violencia y desmedido crecimiento del narcotráfico de este México ensangrentado (Felipe Calderón), entonces, aprovecho este espacio para invitar a mis lectores para hacerse del libro que aquí describo, con el cual Bartlett Díaz y sus colaboradores demostramos que la responsabilidad que se le atribuye como autor de “la caída del sistema” es una burda falacia, en la que los intereses perversos de Salinas de Gortari, Felipe Calderón y Diego Fernández de Ceballos fueron determinantes, y así, hacer que el chivo expiatorio siguiera vivo.

En breve, acompañaré en distintos foros a Manuel Bartlett Díaz para hablar de la obra en la que el autor se referirá a la primera parte del libro, y yo haré lo propio por lo que hace a las inverosímiles resoluciones que exoneran al responsable de causar daño moral a su persona, con un cúmulo de pruebas de naturaleza técnico-jurídica que harán flipar a nuestros futuros escuchas. ¡Abur!

mezavcm.abogados@gmail.com