/ miércoles 10 de abril de 2024

Sin Prudencia | Armenta y Lalo: campañas de lodo desde Facebook

Decía el finado analista político de la UPAEP, Manuel Díaz Cid, que para iniciar a escudriñar sobre las manos que mueven los hilos de la política y tratar de entender ciertos fenómenos, la pregunta básica con la que se debe partir y obviamente explorar sus respuestas es la de ¿quién se beneficia?

Este simple cuestionamiento ayuda a entender o tratar de explicarnos las motivaciones que hay detrás de una decisión de un gobernante, la promulgación de alguna ley, un ajuste en un gabinete, un atentado contra cierta figura política y un largo etcétera.

Para el caso que hoy nos ocupa, el de la guerra de lodo o campañas negras desde Facebook, resulta evidente que quienes las pautan intentan favorecer a sus respectivos jefes, Alejandro Armenta Mier y Eduardo Rivera Pérez, en su intento por desacreditar al adversario en su lucha por hacerse de la gubernatura.

Aunque se supone que Facebook debería de detectar e impedir este tipo de propaganda lo cierto es que son evidentes los anuncios con los que bombardean a posibles electores con pautados hormiga de 15 mil o 30 mil pesos desde supuestos medios de comunicación que incluso han cambiado de nombre o página.

Públicamente lo negarán, pero ambos bandos recurren a estas prácticas en aras de desacreditar a sus enemigos. ¿Quiénes se benefician? Pues Eduardo Rivera y Alejandro Armenta. Quienes operen estas publicaciones es lo de menos.

Foto: Captura de pantalla Facebook

Una muestra de estos ataques, en este caso en contra del candidato de la coalición Mejor Rumbo para Puebla, integrada por PAN, PRI, PRD y PSI es una publicación de página “Giro 180” que tiene apenas 120 seguidores y se jacta de ser un medio de comunicación.

Desde esta cuenta se han pagado 24 mensajes que encajan dentro de la descripción de guerra sucia en contra de Eduardo Rivera, de Mario Riestra Piña, el panista que busca la alcaldía de Puebla por la misma coalición y de Jesús Zaldivar, presidente del Comité Directivo Municipal del PAN.

La campaña más reciente se pautó del 1 al 10 de abril; ahí se monta un video y posteo donde se señala que Eduardo Rivera es acusado de corrupción por un presunto contrato a una empresa fantasma.

Con tres anuncios se lograron tres millones de impactos y se gastaron entre 42 mil y 48 mil 500 pesos.

Vamos del otro lado.

Desde la página “Del ego al Juego”, inserta en la categoría de videojuegos y creada el 27 de febrero pasado se han pautado ocho mensajes de lodo donde con mensajes como “La historia no puede repetirse. No queremos otro #GoberPrecioso” o “Armenta alumno fiel a las enseñas de Mario Marín, la misma historia, las mismas mañas”, intentan recordar su pasado priista y como funcionario cercano del exgobernador actualmente encarcelado.

La campaña más reciente está pautada tanto para Facebook como para Instagram del 6 al 10 de abril en la que se difunde una foto en blanco y negro de Armenta y Marín dándose un saludo y con la frase “Se disfrazan en la 4T para intentar volver a robar”.

Para ello se invertirán entre 25 mil y 35 mil pesos y buscan entre 850 mil y un millón de impactos.

¿Cuantos más de estos mensajes se están distribuyendo en este momento desde Facebook? ¿Pueden las autoridades electorales fiscalizar o endosar estos dineros a los gastos de campaña de sus beneficiarios?

Hasta la próxima.

Decía el finado analista político de la UPAEP, Manuel Díaz Cid, que para iniciar a escudriñar sobre las manos que mueven los hilos de la política y tratar de entender ciertos fenómenos, la pregunta básica con la que se debe partir y obviamente explorar sus respuestas es la de ¿quién se beneficia?

Este simple cuestionamiento ayuda a entender o tratar de explicarnos las motivaciones que hay detrás de una decisión de un gobernante, la promulgación de alguna ley, un ajuste en un gabinete, un atentado contra cierta figura política y un largo etcétera.

Para el caso que hoy nos ocupa, el de la guerra de lodo o campañas negras desde Facebook, resulta evidente que quienes las pautan intentan favorecer a sus respectivos jefes, Alejandro Armenta Mier y Eduardo Rivera Pérez, en su intento por desacreditar al adversario en su lucha por hacerse de la gubernatura.

Aunque se supone que Facebook debería de detectar e impedir este tipo de propaganda lo cierto es que son evidentes los anuncios con los que bombardean a posibles electores con pautados hormiga de 15 mil o 30 mil pesos desde supuestos medios de comunicación que incluso han cambiado de nombre o página.

Públicamente lo negarán, pero ambos bandos recurren a estas prácticas en aras de desacreditar a sus enemigos. ¿Quiénes se benefician? Pues Eduardo Rivera y Alejandro Armenta. Quienes operen estas publicaciones es lo de menos.

Foto: Captura de pantalla Facebook

Una muestra de estos ataques, en este caso en contra del candidato de la coalición Mejor Rumbo para Puebla, integrada por PAN, PRI, PRD y PSI es una publicación de página “Giro 180” que tiene apenas 120 seguidores y se jacta de ser un medio de comunicación.

Desde esta cuenta se han pagado 24 mensajes que encajan dentro de la descripción de guerra sucia en contra de Eduardo Rivera, de Mario Riestra Piña, el panista que busca la alcaldía de Puebla por la misma coalición y de Jesús Zaldivar, presidente del Comité Directivo Municipal del PAN.

La campaña más reciente se pautó del 1 al 10 de abril; ahí se monta un video y posteo donde se señala que Eduardo Rivera es acusado de corrupción por un presunto contrato a una empresa fantasma.

Con tres anuncios se lograron tres millones de impactos y se gastaron entre 42 mil y 48 mil 500 pesos.

Vamos del otro lado.

Desde la página “Del ego al Juego”, inserta en la categoría de videojuegos y creada el 27 de febrero pasado se han pautado ocho mensajes de lodo donde con mensajes como “La historia no puede repetirse. No queremos otro #GoberPrecioso” o “Armenta alumno fiel a las enseñas de Mario Marín, la misma historia, las mismas mañas”, intentan recordar su pasado priista y como funcionario cercano del exgobernador actualmente encarcelado.

La campaña más reciente está pautada tanto para Facebook como para Instagram del 6 al 10 de abril en la que se difunde una foto en blanco y negro de Armenta y Marín dándose un saludo y con la frase “Se disfrazan en la 4T para intentar volver a robar”.

Para ello se invertirán entre 25 mil y 35 mil pesos y buscan entre 850 mil y un millón de impactos.

¿Cuantos más de estos mensajes se están distribuyendo en este momento desde Facebook? ¿Pueden las autoridades electorales fiscalizar o endosar estos dineros a los gastos de campaña de sus beneficiarios?

Hasta la próxima.