En los últimos dos años, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) no ha generado un solo plan para intervenir o sanear el Río Atoyac, uno de los raudales más contaminados de la Cuenca del Río Balsas, según el Sistema Nacional de Información del Agua (SINA).
En el periodo comprendido entre 2012 y 2019 la Conagua llevó a cabo inversiones consecutivas enfocadas en el estudio y elaboración de proyectos relacionados al tratamiento del líquido que desemboca en el Atoyac, sin embargo, desde ese último año no se ha propuesto ninguna acción, de ninguna índole, relacionada al afluente.
Lo anterior se determinó con base en lo estipulado por el organismo federal en una solicitud de información, misma que fue hecha a través de la Plataforma Nacional de Transparencia y que quedó asentada en el folio 330009422000979.
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El último plan que la Conagua implementó fue en 2019 y el mismo formó parte del Programa de Agua Potable, Drenaje y Saneamiento (Proagua). Bajo la justificación de beneficiar a 203 mil 452 personas, se construyeron, a lo largo de 10 kilómetros, colectores y subcolectores, específicamente del tramo que va de Zahuapan a la Planta de Tratamiento de Aguas, también conocida como Barranca del Conde, en Puebla capital.
Para llevar a cabo esta intervención, la dependencia justificó la inversión de 2 millones 664 mil 895 pesos. Sin embargo, esa no fue la cifra más alta costeada por el erario federal en relación al Río Atoyac en los últimos años.
EN 2017 CONAGUA CONSTRUYÓ COLECTORES
Durante los 12 meses que duró 2017, fueron inyectados 16 millones 833 mil 717 pesos, los cuales fueron utilizados principalmente para la construcción de colectores, tratamiento de aguas, además de la elaboración de un plan estatal hídrico. Dichos proyectos se concentraron en cinco municipios: Puebla, Huejotzingo, San Martín Texmelucan, Domingo Arenas y Santa Rita Tlahuapan.
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Según reportó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), estos proyectos acapararon el 19.5 por ciento del total del presupuesto federal etiquetado para planes de intervención en la entidad poblana.
No obstante, de 2019 a la fecha ningún otro proyecto similar ha sido propuesto ni mucho menos financiado directamente por la dependencia federal.
Es importante señalar que, de acuerdo con una investigación hecha por María Fernanda Leal Juárez, alumna de la Universidad Iberoamericana Puebla, los principales actores contaminantes del afluente son empresas que operan en el corredor industrial Quetzalcóatl, en San Martín Texmelucan, mismas que se enfocan en actividades textiles y metalúrgicas.
Aunado a ello, las embotelladoras, así como las empresas que manejan sustancias como blanqueadores clorados, hidróxido de sodio, agua oxigenada e índigo, las cuales por cierto también operan en Tlaxcala, son corresponsables de la polución del Atoyac.
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GOBERNADOR DE PUEBLA ACUSA POCA VOLUNTAD DE LA CONAGUA
Fue a través de su conferencia de prensa del pasado 1 de junio cuando el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, señaló que la Conagua es el organismo responsable de verificar y clausurar los actores contaminantes del afluente, sin embargo, criticó que la dependencia “no tiene una definición clara” sobre el tema.
Aunado a ello, apuntó que las tareas de saneamiento del Atoyac no serán posibles si no existe voluntad fiscal desde la administración federal.
“Lo digo de manera clara, le hemos invertido año con año, de diferentes maneras [al] saneamiento del Atoyac (...) pero no habrá una recuperación si no es con el apoyo de la Federación”, recalcó en conferencia de prensa.
Finalmente, hizo hincapié en que las finanzas públicas del estado de Puebla no son suficientes por sí solas para complementar esta labor, por lo que insistió en que la Federación debe aportar una cantidad superior a la que actualmente otorga, pues esta será la única forma de sanear adecuadamente el río. Según estimó el mandatario, se requieren más de 7 mil millones de pesos, razón por la cual también se pronunció a favor de crear un fondo colectivo con el Gobierno de Tlaxcala.
