Otra vez me veo en la necesidad de tomar este espacio para pedir que las autoridades actúen para garantizar la seguridad de la población, sobre todo de las mujeres.
El asesinato de la abogada Cecilia Monzón, que ocurrió recientemente, debe ser un estímulo para que nuestras autoridades redefinan su estrategia de seguridad, debido a que –de acuerdo a medios de comunicación- el crimen se efectuó en una avenida transitada, durante el día, y en un Pueblo Mágico, por cierto.
Todavía no concluye la investigación, pero es visible que se trató de un hecho delictivo lamentable, que debe ponernos en alerta, toda vez que se trataba de una mujer que alzaba la voz y defendía los derechos de los sectores con más vulnerabilidades.
Coincidí con Cecilia en algunos eventos, aunque no tuve una relación muy cercana con ella.
La manera en cómo murió sí asusta e indigna, pues ninguna mujer –ni ningún hombre- debería fallecer de tan cruel manera.
Desde que el país era gobernado por Felipe Calderón y declaró la guerra contra el narco, he escuchado con mayor frecuencia el término “Estado fallido”, que habla de impunidad, de que la inseguridad ha rebasado a las autoridades y de que cualquier delincuente tiene poder para hacer y deshacer en nuestro país.
A pesar de los cambios de partidos políticos en el poder, las cosas no se han transformado tanto en los últimos años en cuanto a seguridad, lo cual es totalmente lamentable, ya que la ciudadanía, el empresariado, las organizaciones no gubernamentales, y todas las personas que hemos confiado en cambios, simplemente no los hemos visto.
Por cierto, aunque pareciera que los temas de género e inseguridad están alejados de los asuntos económicos, definitivamente, impactan en asuntos como la estabilidad social y la intención para invertir, pues para las empresas es vital que permanezca el Estado de Derecho en una entidad donde se depositará el capital.
Por donde la veamos, lo que pasó con Monzón es lamentable de inseguridad, obviamente para la familia y los seres queridos, y para la sociedad, la cual espera cada vez menos delitos.
Confío en que las autoridades actuarán en el esclarecimiento de la muerte de Cecilia, aunque es un hecho que las familias de todas las víctimas necesitan certeza jurídica, que si bien, jamás les reparará el daño, será un antecedente para que los delitos dejen de repetirse.
¡Nos leemos en la siguiente!
Twitter: @OlgaMendezMex
