/ martes 15 de diciembre de 2020

De chantajes, disputas, intrigas y tragedias…

Inmersos ya en el proceso electoral 2021, los actores políticos y los operadores aparecen en escena con una sola intención: permanecer o hacerse del poder, aunque para ello tengan que hacer cualquier bajeza.

Esto es lo que ocurrió el lunes, cuando un audio se convirtió en el escándalo del círculo rojo en Puebla. El líder en Huejotzingo de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM), Gustavo Teniza, grabó con premeditación y difundió con alevosía una llamada telefónica sostenida con la alcaldesa Angélica Alvarado Juárez durante la protesta que organizó con choferes de Los Rojos en el municipio.

El exabrupto provocado por el transportista tiene un antes y una intención sucesiva. Con antelación, el líder había sostenido diálogos con la alcaldesa, sin conseguir nada, e incluso en el audio se alcanza a escuchar a la morenista soltar: “a mí no me va a venir a mandar un sindicato”, a lo que el representante responde: “bueno, si no quieres, pues adelante”.

De buena fuente, nos comentan que Teniza intentó presionar a Alvarado Juárez para conseguir beneficios, al nivel de la extorsión, y lo escuchado ayer fue el último capítulo de un desencuentro anticipado, con el que la munícipe le puso un alto a una serie de amenazas con intereses políticos y contrarios a la gobernabilidad.

La versión, no tiene pierde, y es que los transportistas que se manifestaron en el municipio y cerraron la federal a Puebla, en realidad carecen de los permisos necesarios para operar en carrusel tal como lo exigieron, muestra de ello es que, tras la mesa de diálogo, la Secretaría de Movilidad y Transporte se comprometió en apoyar a Los Rojos para que consigan la documentación necesaria a fin de trabajar dentro de la legalidad.

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Una tragedia ocurrió el fin de semana en el municipio de Acateno, en la Sierra Nororiental de Puebla, cuando una mujer fue asesinada presuntamente por su pareja sentimental, luego de que asistieran a una fiesta privada.

Aunque el caso intentó ser guardado con hermetismo, trascendió que la fiesta fue organizada por el expresidente municipal Julio Cabañas, en un rancho que es propiedad del actual alcalde Edgar Murrieta. Hasta ahora ninguno de los políticos ha rechazado la versión…

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