/ jueves 6 de junio de 2019

¿Milagro azul?

El domingo fue un día crudo para el PAN y por primera vez para Enrique Cárdenas tras vivir en tiempo real la derrota cantada que les habían anticipado, sin embargo el lunes, paradójicamente la frialdad de los números que les confirmaron su fracaso electoral, al mismo tiempo les cobijo y un suspiro de esperanza para el futuro 2021.

Tras estar acostumbrados a ganar elecciones en los últimos años, el dolor del descalabro pesó aún más fuerte a los panistas, pero luego de limpiarse las lágrimas los albiazules analizaron los números del PREP del INE y su semblante cambió al darse cuenta que los números les ubicaron en el primer lugar de las preferencias estatales al obtener 414 mil 356 votos y además en Puebla capital el mismo PAN superó a Morena por 14 puntos porcentuales. ¡Oh my god! fue la sorpresiva expresión.

Los números para el PAN son buenos, pero no definitivos. Morena perdió bonos pero no va a quedarse cruzada de brazos. El PAN ganó en municipios metropolitano, pero Morena ganó en todo el Estado. EL PAN ganó un tanque de oxígeno, pero Morena y sus alcaldes ganaron un gobernador que no les dejará solos.

Como siempre, los optimistas han visto la parte positiva a pesar del resultado negativo. Y entre los positivistas hoy ven que Enrique Cárdenas fue el salvador de esa votación numérica para el PAN. Sin un candidato con buena imagen y reputación como la del ex rector de la UDLAP, ninguno de los panistas hubiera logrado la sorpresiva votación, eso lo saben bien los azules.

Tras esos datos reales del PREP, los aventurados han comenzado a deslizar la idea de que no pueden desaprovechar lo logrado por el economista por lo que han sugerir la idea de que debería ser considerado un fuerte y serio candidato a la presidencia municipal de Puebla justamente dentro de 2 años, en donde con los números que obtuvo, ganaría cruzado de brazos.

Aunque seguramente habrá otros tiradores que se sentirán con derecho, querrán reclamar esa nominación, sin embargo la mejor manera de ver si se la merecen es revisar que hicieron antes del 2 de junio para intentar ganar. Aunque esa revisión de su conducta solo servirá para confirmar que se hicieron majes.

¿Milagro azul?

¿Qué hubiera pasado si todos los y las panistas se hubieran puesto a chambear al 100% en torno a la candidatura Cárdenas? Pues quizá la historia sería otra, pero a muchos siempre les valió y nunca tenían esperanzas en el ex rector.

El equipo del doctor estaba hasta la coronilla de la simulación del supuesto apoyo panista. Todos veían como las vacas sagradas albiazules solo iban a tomarse la fotografía ante la prensa, pero nada más.

Si no es cierta tal conducta entonces ¿dónde quedó el arrastre de Lalo Rivera? ¿Dónde quedó el punch de Mario Riestra o del comodino de Jorge Aguilar? Y que decir de la marginal presencia de Ana Teresa Aranda, de Pablo Rodríguez o de los yunquistas de hueso colorado. Así se podrían citar nombres, nombres y más nombres y al final la conclusión sería la misma: se hicieron wueeee...ros.

Ahora que lleguen los tiempos de las candidaturas para el 2021 o el 2024, ahí sí se van a aparecer para exigir lo que creen merecer. Ya será chamba de la dirigencia capotear ese torito. Mientras tanto nuevamente se reitera que los números del PAN fueron un milagro que se convierte en una lucecita en medio de la obscuridad azul.

¿Y el tricolor?

Los priistas camoteros están relajados después del domingo. Su derrota anunciada ya la digirieron. Los resultados no les cayeron extraños. Aunque en plena campaña algunos de tricolores andaban soñando despiertos; pero hoy la realidad ya los despertó y ello les hizo recordar, por eso no olvidan las traiciones de “sus militantes”.

Juran y perjuran que en esta ocasión no quedarán impunes y sin castigo, aquellos que en plena campaña le dieron la espalda al PRI. Envalentonados y encaaa...nijados, sostienen que las expulsiones de las y los traidores será un asunto inmediato.

Aunque los dirigentes dicen que no son muchos los judas, y que tampoco fueron definitivas para que el partido perdiera, sí están decididos a promover la expulsión de figuras como Maritza Marín, Leobardo Soto, Vanesa Barahona, Javier López Zavala y otros que ya ubicaron. Pues en esta ocasión aplica el clásico dicho de Santo Tomás: Hasta no ver, no creer. Ah y mientras tanto se analiza que el ex candidato Alberto Jiménez Merino se quede con el control absoluto del RIP.

Como es costumbre, le recuerdo que tenemos abierto el changarro las 24 horas. Si quiere compartir chismes, ocurrencias y uno que otro tip, siempre son bienvenidos en Twitter @ferabrajan1 y en fabrajan@hotmail.com

El domingo fue un día crudo para el PAN y por primera vez para Enrique Cárdenas tras vivir en tiempo real la derrota cantada que les habían anticipado, sin embargo el lunes, paradójicamente la frialdad de los números que les confirmaron su fracaso electoral, al mismo tiempo les cobijo y un suspiro de esperanza para el futuro 2021.

Tras estar acostumbrados a ganar elecciones en los últimos años, el dolor del descalabro pesó aún más fuerte a los panistas, pero luego de limpiarse las lágrimas los albiazules analizaron los números del PREP del INE y su semblante cambió al darse cuenta que los números les ubicaron en el primer lugar de las preferencias estatales al obtener 414 mil 356 votos y además en Puebla capital el mismo PAN superó a Morena por 14 puntos porcentuales. ¡Oh my god! fue la sorpresiva expresión.

Los números para el PAN son buenos, pero no definitivos. Morena perdió bonos pero no va a quedarse cruzada de brazos. El PAN ganó en municipios metropolitano, pero Morena ganó en todo el Estado. EL PAN ganó un tanque de oxígeno, pero Morena y sus alcaldes ganaron un gobernador que no les dejará solos.

Como siempre, los optimistas han visto la parte positiva a pesar del resultado negativo. Y entre los positivistas hoy ven que Enrique Cárdenas fue el salvador de esa votación numérica para el PAN. Sin un candidato con buena imagen y reputación como la del ex rector de la UDLAP, ninguno de los panistas hubiera logrado la sorpresiva votación, eso lo saben bien los azules.

Tras esos datos reales del PREP, los aventurados han comenzado a deslizar la idea de que no pueden desaprovechar lo logrado por el economista por lo que han sugerir la idea de que debería ser considerado un fuerte y serio candidato a la presidencia municipal de Puebla justamente dentro de 2 años, en donde con los números que obtuvo, ganaría cruzado de brazos.

Aunque seguramente habrá otros tiradores que se sentirán con derecho, querrán reclamar esa nominación, sin embargo la mejor manera de ver si se la merecen es revisar que hicieron antes del 2 de junio para intentar ganar. Aunque esa revisión de su conducta solo servirá para confirmar que se hicieron majes.

¿Milagro azul?

¿Qué hubiera pasado si todos los y las panistas se hubieran puesto a chambear al 100% en torno a la candidatura Cárdenas? Pues quizá la historia sería otra, pero a muchos siempre les valió y nunca tenían esperanzas en el ex rector.

El equipo del doctor estaba hasta la coronilla de la simulación del supuesto apoyo panista. Todos veían como las vacas sagradas albiazules solo iban a tomarse la fotografía ante la prensa, pero nada más.

Si no es cierta tal conducta entonces ¿dónde quedó el arrastre de Lalo Rivera? ¿Dónde quedó el punch de Mario Riestra o del comodino de Jorge Aguilar? Y que decir de la marginal presencia de Ana Teresa Aranda, de Pablo Rodríguez o de los yunquistas de hueso colorado. Así se podrían citar nombres, nombres y más nombres y al final la conclusión sería la misma: se hicieron wueeee...ros.

Ahora que lleguen los tiempos de las candidaturas para el 2021 o el 2024, ahí sí se van a aparecer para exigir lo que creen merecer. Ya será chamba de la dirigencia capotear ese torito. Mientras tanto nuevamente se reitera que los números del PAN fueron un milagro que se convierte en una lucecita en medio de la obscuridad azul.

¿Y el tricolor?

Los priistas camoteros están relajados después del domingo. Su derrota anunciada ya la digirieron. Los resultados no les cayeron extraños. Aunque en plena campaña algunos de tricolores andaban soñando despiertos; pero hoy la realidad ya los despertó y ello les hizo recordar, por eso no olvidan las traiciones de “sus militantes”.

Juran y perjuran que en esta ocasión no quedarán impunes y sin castigo, aquellos que en plena campaña le dieron la espalda al PRI. Envalentonados y encaaa...nijados, sostienen que las expulsiones de las y los traidores será un asunto inmediato.

Aunque los dirigentes dicen que no son muchos los judas, y que tampoco fueron definitivas para que el partido perdiera, sí están decididos a promover la expulsión de figuras como Maritza Marín, Leobardo Soto, Vanesa Barahona, Javier López Zavala y otros que ya ubicaron. Pues en esta ocasión aplica el clásico dicho de Santo Tomás: Hasta no ver, no creer. Ah y mientras tanto se analiza que el ex candidato Alberto Jiménez Merino se quede con el control absoluto del RIP.

Como es costumbre, le recuerdo que tenemos abierto el changarro las 24 horas. Si quiere compartir chismes, ocurrencias y uno que otro tip, siempre son bienvenidos en Twitter @ferabrajan1 y en fabrajan@hotmail.com