Educar es una tarea de gran envergadura, que consiste en preparar para la vida y contribuir al proceso de socialización, es decir, a la formación de la persona para que se integre en su medio social y cultural y sea capaz de hacer frente a los retos que le plantea su entorno.
Desde tiempos anteriores, las comunidades, sociedades y culturas han derrochado esfuerzos por satisfacer las necesidades básicas de la existencia, en primer lugar, y más tarde, con la aparición de la tecnología y de las innovaciones que ésta ha posibilitado, se propusieron metas más ambiciosas como dominar la naturaleza, mejorar las condiciones de vida y garantizar la transmisión de las pautas culturales.
Para el Sistema Educativo del país, la educación es un bien en sí, y condición necesaria para el acceso a otros bienes, ésta es factor estratégico del desarrollo y hace posible asumir modos de vida superiores, así como permite el aprovechamiento de las oportunidades que han abierto la ciencia, la tecnología y la cultura de este tiempo.
En el México, nuestra educación es una institución que reflejan las características y expectativas de la sociedad en que están ubicadas. Tienen una indudable función transmisora, pero no se limitan a ellas sino que, conjugando la dialéctica entre tradición e innovación, desarrollan una función anticipadora, en la cual no se conforman con rescatar el pasado sino que intervienen en el futuro en un ambiente de calidad que se define en torno de factores.
La funcionalidad, referido a qué es lo que se aprende en el sistema educativo y su relación en términos individuales y sociales, por ello, una educación de calidad es aquella cuyos contenidos responden adecuadamente a lo que el individuo necesita para desarrollarse como persona (intelectual, afectiva, moral y física) y para desempeñarse en los diversos ámbitos de la sociedad (económico, político y social)
Eficacia en una educación de calidad es aquella que logra que los alumnos realmente aprendan lo que se supone deben aprender al cabo de determinados ciclos o niveles.
Eficiencia, se refiere a la calidad de los procesos y medios que el Sistema Educativo brinda a los alumnos para experiencia educativa. Desde esto, una educación de calidad es aquella que ofrece a los estudiantes un adecuado contexto físico de aprendizaje, un cuerpo docente convenientemente preparado para la tarea de enseñar, buenos materiales, estrategias didácticas adecuadas, instalaciones suficientes, etcétera.
Aunado lo anterior, las educación pone todo el énfasis posible y hacen hincapié en el sujeto, es decir en el niño o adolescente, favoreciendo su autonomía personal y el aprendizaje a través de la experiencia, desarrollando una gestión escolar con su manera propia para asumir y materializar en acciones la conducción del proceso educativo de los educandos, concibiéndolo como la construcción cotidiana en el que intervienen maestros, alumnos, director, padres de familia y autoridades educativa y en la que se medía la toma de decisiones, las relaciones interpersonales y estilos o formas de proceso de la autoridad y que supone procesos políticos, laborales y administrativos, eliminando los límites que significan ensamblar programaciones y actividades solamente, sin reflexionar sobre qué modelo de persona pretende educar, pero si entendiendo como fundamental considerar un equilibrio entre el conocimiento y la aplicación del método científico y una valoración de la herencia humanista, suprimiendo la acumulación de datos y su aplicación mecánica que tienen un valor muy relativo, a través de un proyecto educativo propio que trabaja y favorece la construcción de mentalidades críticas que se potencian y fortalecen continuamente.
Educar es formar personas fuerte y saludables para el futuro que adquieran autonomía, es decir, capacidad de tomar decisiones y de hacer frente a las consecuencias de las opciones que realicen con base en considerar ambientes democráticos vinculados a la educación que permitan la plena escolarización de los alumnos, para tratar de conseguir igualdad en las oportunidades de aprendizaje y formación; a la autonomía de los centros escolares respecto a la selección plural de las formas de libertad docente, y el respeto de las diferencias y la expresión de los valores que se pretenden para las nuevas generaciones.
*Doctor en Educación.
