El reciente anuncio del excandidato a la gubernatura por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) en 2019, Alberto Jiménez Merino, abrió de inmediato las especulaciones sobre si su determinación va encaminada a sumarse, como otros varios priístas, a las filas de Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
Por lógica que parezca la salida del exsecretario de Desarrollo Rural en tiempos del hoy encarcelado Mario Marín Torres y adherirse al proyecto político de otro expriísta, exsecretario de Desarrollo Social en el marinismo, Alejandro Armenta Mier, hoy enfundado como aspirante morenista a la gubernatura, pudiera no ser del todo certera.
Entre los priistas se dice que Jiménez Merino llegará a Morena y que esto fue por invitación de Ramón Fernández Solana, quien fuera dirigente estatal del mal logrado partido Redes Sociales Progresistas (RSP) y que a finales del año pasado se sumó al proyecto 2024 del presidente del senado.
Lo cierto es que no es a Morena a donde se encamina el otrora priista, que tuvo 34 años de militancia.
Pero si no es al partido del presidente Andrés Manuel López Obrador, el exdiputado y exdelegado de Sagarpa se aproxima a algo parecido.
Hay que decir que Ramón Fernández está próximo a hacer un pronunciamiento en el que descartará tener una participación en el partido Morena y por ende en alguna invitación hacia Jiménez Merino.
Se deslindará incluso, aquí viene una pista, de Fernando González Sánchez, quien fue presidente nacional del partido Redes Sociales Progresistas.
Tras la pérdida de registro de RSP como partido nacional, González Sánchez creó, con lo que quedó, una agrupación política denominada Movimiento Nacional Progresista, que pretende ser un apéndice de Morena y para fines de la elección presidencial, promueve las aspiraciones de la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum.
Dicho esto, la inferencia apunta a que Alberto Jiménez abandonó el PRI para convertirse en breve en el coordinador estatal de Movimiento Nacional Progresista en representación de los intereses y prebendas que intente hacer esa agrupación a cambio de sumar a sus operadores a los candidatos, sí, de Morena.
*
La tan criticada utilización de espectaculares, con supuestas entrevistas en revistas, para apuntalar a candidatos en tiempos del morenovallismo, parece no incomodar en tiempos de la Cuarta Transformación.
De lo contrario no se explicaría la colocación de espectaculares a favor de Claudia Sheinbaum, incluso financiados con recursos de diputados federales.
Tampoco se entendería la forma en que el diputado de Morena Ignacio Mier Velazco aparece burdamente en otros promocionales, como los que se aprecian en la foto principal de la edición de este jueves en El Sol de Puebla.
Esta es la segunda ocasión en la que aparecen espectaculares de “Nacho Mier”, aspirante a la gubernatura el próximo año, quien, como clásico político, negará tener injerencia en su colocación.
Pues ¿no que eran diferentes?
