/ jueves 29 de marzo de 2018

Los teléfonos celulares y la escuela

Con frecuencia los maestros se enfrentan a problemas con sus alumnos por el mal uso de los teléfonos celulares que sus padres les han entregado para una comunicación familiar.

Los expertos recomiendan que los docentes deben de participar en programas de capacitación en el desarrollo profesional sobre el uso de estas tecnologías para la enseñanza a sus alumnos.

Sin embargo, rara vez advierten los potenciales de esas tecnologías que sus alumnos ya están utilizando. El teléfono celular es un dispositivo de ese tipo. Su valor como herramienta educativa es enorme y está virtualmente desaprovechado. La capacidad de memoria actualmente es amplia y se puede navegar como una laptop o computadora.

Los celulares son ya un objeto cotidiano en las vidas de los niños y adolescentes. Algunos estudios que se han realizado, más niños de 8 a 10 años tienen un teléfono celular. De los 11 a 14 años ya casi todos tiene un celular; y los adolescentes de los 15 a los 18 años de edad, un celular es parte de sus complementos personales.

Los niños pequeños utilizan el teléfono celular para entrar en contacto con sus papás. Las señoritas tienen más a dar aplicaciones sociales al celular, poniéndose en contacto con sus amigos y amigas, utilizando muchas horas de tiempo aire. Los jóvenes están más inclinados a los juegos y competencias que ya se realizan con otros cibernautas en vía Internet.

En encuestas realizadas con los alumnos, se confirma la importancia de los teléfonos celulares entre los adolescentes, algunos de los cuales los emplean para enviar mensajes desde el salón de clases, aun cuando esta actividad está prohibida en las escuelas.

Los niños utilizan sus teléfonos celulares para toda clase de actividades, desde llamadas breves a sus padres, varias horas enviando textos a sus amigos, escuchar música, jugar y mirar videos. Los niños que tienen teléfonos celulares con cámara toman más fotos que los jóvenes y las envían a sus amigos.

Los jóvenes utilizan más el Internet para revisar su correo electrónico y su Facebook, buscar cualquier información que se necesita para las tareas escolares diarias.

Los negocios han advertido la gran demanda que tienen niños y jóvenes a través de sus teléfonos celulares, por lo que han diseñado publicidad y mensajes para el público receptor.

Los fabricantes de teléfonos celulares y de dispositivos inalámbricos dirigen sus anuncios a los niños y a la gente joven, diseñándose diversos productos para que puedan transportar con mayor facilidad sus celulares: ropa, mochilas, correas, implementos para protegerlos y muchos más.

Se ha reportado que los teléfonos celulares se utilizan cada día más en la educación. Algunos maestros orientan a sus alumnos para realizar trabajos de investigación en la escuela; buscar alguna información con precisión; realizan algunos experimentos y tomarles fotografía con los celulares; localizar lecturas; realizar juegos didácticos a través de los teléfonos celulares como: Kahoot y otros más.

En las escuelas seguramente se podrá hacer uso adecuado de la tecnología que brindan los teléfonos celulares, una tecnología relativamente barata y portátil, que ya está en las manos de la mayoría de los niños y jóvenes estudiantes.

El uso más sencillo de los teléfonos celulares por parte de los alumnos radica en no perder de vista sus posibilidades de buscadores de información y facilitadores en la enseñanza, ya que contiene calendario, agenda, sumadora, localizador y muchas más funciones que están relacionadas con las clases diarias.

En muchas escuelas, los maestros exigen que los alumnos tengan un teléfono celular como parte del material escolar del diario, para anotar las tareas, tomar fotos de los trabajos, buscar información de investigación y enviar a los compañeros sus participaciones en las exposiciones, pensando que los alumnos no tienen computadora o acceso a Internet en sus casas.

Los teléfonos celulares se han considerados como la herramienta necesaria e indispensable dentro de la materia de matemáticas y de las ciencias, como estrategia alternativa de enseñanza. Los maestros asignan problemas matemáticos a los alumnos para que los soluciones con el teléfono celular. Si necesitan ayuda, se pueden conectar con sus compañeros y enviar el resultado al docente.


*Doctor en Educación.


Con frecuencia los maestros se enfrentan a problemas con sus alumnos por el mal uso de los teléfonos celulares que sus padres les han entregado para una comunicación familiar.

Los expertos recomiendan que los docentes deben de participar en programas de capacitación en el desarrollo profesional sobre el uso de estas tecnologías para la enseñanza a sus alumnos.

Sin embargo, rara vez advierten los potenciales de esas tecnologías que sus alumnos ya están utilizando. El teléfono celular es un dispositivo de ese tipo. Su valor como herramienta educativa es enorme y está virtualmente desaprovechado. La capacidad de memoria actualmente es amplia y se puede navegar como una laptop o computadora.

Los celulares son ya un objeto cotidiano en las vidas de los niños y adolescentes. Algunos estudios que se han realizado, más niños de 8 a 10 años tienen un teléfono celular. De los 11 a 14 años ya casi todos tiene un celular; y los adolescentes de los 15 a los 18 años de edad, un celular es parte de sus complementos personales.

Los niños pequeños utilizan el teléfono celular para entrar en contacto con sus papás. Las señoritas tienen más a dar aplicaciones sociales al celular, poniéndose en contacto con sus amigos y amigas, utilizando muchas horas de tiempo aire. Los jóvenes están más inclinados a los juegos y competencias que ya se realizan con otros cibernautas en vía Internet.

En encuestas realizadas con los alumnos, se confirma la importancia de los teléfonos celulares entre los adolescentes, algunos de los cuales los emplean para enviar mensajes desde el salón de clases, aun cuando esta actividad está prohibida en las escuelas.

Los niños utilizan sus teléfonos celulares para toda clase de actividades, desde llamadas breves a sus padres, varias horas enviando textos a sus amigos, escuchar música, jugar y mirar videos. Los niños que tienen teléfonos celulares con cámara toman más fotos que los jóvenes y las envían a sus amigos.

Los jóvenes utilizan más el Internet para revisar su correo electrónico y su Facebook, buscar cualquier información que se necesita para las tareas escolares diarias.

Los negocios han advertido la gran demanda que tienen niños y jóvenes a través de sus teléfonos celulares, por lo que han diseñado publicidad y mensajes para el público receptor.

Los fabricantes de teléfonos celulares y de dispositivos inalámbricos dirigen sus anuncios a los niños y a la gente joven, diseñándose diversos productos para que puedan transportar con mayor facilidad sus celulares: ropa, mochilas, correas, implementos para protegerlos y muchos más.

Se ha reportado que los teléfonos celulares se utilizan cada día más en la educación. Algunos maestros orientan a sus alumnos para realizar trabajos de investigación en la escuela; buscar alguna información con precisión; realizan algunos experimentos y tomarles fotografía con los celulares; localizar lecturas; realizar juegos didácticos a través de los teléfonos celulares como: Kahoot y otros más.

En las escuelas seguramente se podrá hacer uso adecuado de la tecnología que brindan los teléfonos celulares, una tecnología relativamente barata y portátil, que ya está en las manos de la mayoría de los niños y jóvenes estudiantes.

El uso más sencillo de los teléfonos celulares por parte de los alumnos radica en no perder de vista sus posibilidades de buscadores de información y facilitadores en la enseñanza, ya que contiene calendario, agenda, sumadora, localizador y muchas más funciones que están relacionadas con las clases diarias.

En muchas escuelas, los maestros exigen que los alumnos tengan un teléfono celular como parte del material escolar del diario, para anotar las tareas, tomar fotos de los trabajos, buscar información de investigación y enviar a los compañeros sus participaciones en las exposiciones, pensando que los alumnos no tienen computadora o acceso a Internet en sus casas.

Los teléfonos celulares se han considerados como la herramienta necesaria e indispensable dentro de la materia de matemáticas y de las ciencias, como estrategia alternativa de enseñanza. Los maestros asignan problemas matemáticos a los alumnos para que los soluciones con el teléfono celular. Si necesitan ayuda, se pueden conectar con sus compañeros y enviar el resultado al docente.


*Doctor en Educación.