Parece que el presidente municipal de Tlatlauquitepec, Porfirio Loeza Aguilar, no entiende la gravedad de una pandemia como la que estamos atravesando en Puebla, México y el mundo entero.
Para el alcalde emanado de Movimiento Ciudadano el tema de la sana distancia, el confinamiento y las restricciones para actos masivos, como mecanismos para evitar la propagación de la nueva cepa del coronavirus Sars CoV-2, no resultan ser importantes ni para su persona ni para quienes gobierna.
De buenas a primeras, Porfirio Loeza determinó, el pasado domingo, “decretar” semáforo verde en su localidad y organizar un pachangón con unas 200 personas, muchas de las cuales se sentaron una junto a otra en las sillas y mesas dispuestas sin portar, siquiera un cubrebocas.
Con botellas de Magno, Torres 5, tequila, pulque y coca colas, los invitados a la celebración por la inauguración de una vialidad se reunieron a comer un mole de guajolote.
Si el platillo le suena a un supuesto remedio para combatir el coronavirus, eso fue exactamente lo que el alcalde se la pasó diciendo a sus comensales, a manera de broma, que lo preparó para que no les pasara nada.
Como es de suponerse, en la cuenta oficial de Facebook del ayuntamiento solamente se subieron fotos y un video sobre la inauguración de la calle camino a la iglesia y panteón de La Unión que, si bien muestra a varias personas peregrinando por la calle, acompañados de un sacerdote que dio la bendición y por ahí se observa una mesa y sillas a lo lejos, la realidad es que de la fiesta posterior se omiten imágenes.
Para mala fortuna del presidente municipal, hay por lo menos un video, que acompaña a esta columna en la versión web, donde se puede observar que en un contexto pandémico la conducta promovida por la autoridad resulta inapropiada y riesgosa para la salud de quienes asistieron.
Hasta grupo musical para amenizar la fiesta hubo, pero la mala es que la autoridad responsable para impedir la reunión era una de las organizadoras.
Entre los críticos del alcalde ronda la idea de que Porfirio Loeza antepone su idea de seguirse promocionando con miras a buscar la reelección aun a costa de la salud de su gobernados.
Tlatlauquitepec es un municipio que a lo largo de la pandemia ha tenido 56 casos documentados, y el fallecimiento de 11 personas, pero su población es de 57 mil 203 habitantes, según los datos oficiales, por lo que el riesgo y los decretos restrictivos formados por la autoridad estatal aplican para todo el estado.
Ya en abril pasado nuestro personaje había sido denunciado por pobladores de realizar una cabalgata que partió de La Unión hacia Maculiquila con motivo del mal llamado sábado de gloria. En esa ocasión hablaron de decenas de participantes, entre ellos regidores y funcionarios de aquel municipio de la sierra norte.
Así es que ya es reincidente esta actitud.
Hasta la próxima.
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