El día 12 de octubre del año 1492, después de haber navegado durante 72 días, la expedición comandada por Cristóbal Colón llegó a la isla de Guaraní, en el archipiélago de las Bahamas, sin saber que acababan de descubrir un nuevo continente. Su primer contacto fue mal llamado de los indios, pues creían que habían dado la vuelta y habían desembarcado en la India.
Este primer acercamiento fue a un nuevo territorio, que ahora es el Continente Americano, lo cual supone con este descubrimiento el inicio del contacto entre dos mundos, dos culturas distintas, la de indígenas nativos y el de la europea.
La celebración del 12 de octubre fue popularizándose en varios países de América, denominándolo Día de la Raza, como en España, y algunos como Honduras mantienen ese nombre; en otros países como Argentina, Nicaragua o Chile, el nombre ha cambiado para reflejar algún aspecto más personal del país y ha pasado a llamarse encuentro entre dos mundos; día de la resistencia indígena o día de la diversidad cultural.
En México, la primera celebración del Día de la Raza fue el 12 de octubre de 1928, durante el gobierno de Álvaro Obregón, a sugerencia de José Vasconcelos, quien es ese entonces era el Secretario de Educación.
Sin embargo y a pesar de que la idea original era reconocer la unión entre las dos culturas y la celebración de ese encuentro, existen desde siempre, diversas posturas que no están de acuerdo con la institución del Día de la Raza y sus consecuentes celebraciones. El argumento es que el 12 de octubre en realidad debería de ser de luto, debido a que se inició la imposición de la corona Española sobre América para su posterior sometimiento, saqueo y colonización.
Entre diversas razones, algunos historiadores establecen que: En realidad América fue “descubierto” por nuestros antepasados miles de años antes que Colón llegara a la isla de San Salvador. Las huellas de Acahualinca, por ejemplo, tienen más de 2000 años.
Mientras los indígenas ayudaban a los españoles y los acogían como huéspedes, Colón escribía en su diario: “esta gente es muy simple [..] con cincuenta hombres los tendremos sometidos y los podremos obligar a que hagan lo que queramos”.
En su segundo viaje, ya bien armado, Colón exigió a los indígenas comida, oro y derecho con sus mujeres. Después de ganar una guerra y adjudicarse el oro, decidió que no era suficiente botín para llevar a los reyes españoles. Así que esclavizó a 500 indígenas, de los cuales sólo 300 llegaron vivos a España.
Colón inventó un tributo que exigía a los indígenas dar una cuota de oro. Los que la daban, podían colgarse una especie de prenda en el cuello que los protegía por unos cuantos meses. Los que no cumplían con la cuota, les cortaba una mano.
Actualmente, ésta celebración toma distintas connotaciones, dependiendo de la composición étnica del país en se realice.
Los valores y costumbres traídas por los Colonizadores, eran percibidos como “avances civilizatorios”. El descubrimiento no fue tal, en cierta medida terminó siendo un despojo y saqueo a los pueblos originarios de América.
Sin embargo, el encuentro entre estas dos culturas, debería haber sido un encuentro en el que ambos grupos se beneficiaran mutuamente.
El 12 de octubre de 1492, trajo consecuencias funestas para muchos pueblos indígenas del Nuevo Mundo, pero a la vez dio origen al mestizaje étnico y cultural que es característica de los actuales países Americanos.
A final de cuentas, Somos el resultado vivo de ese encuentro de dos mundos distintos y, conmemorar que, a pesar de muchos desencuentros a lo largo de la historia, hay muchos aspectos positivos en la multiplicidad cultural de la cual hoy formamos parte.
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