Un aire de sospechosa cordialidad se respiró entre el senador Alejandro Armenta Mier y el gobernador de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, tras el destape del primero por la candidatura a la presidencia municipal de Puebla.
Y digo sospechoso porque después de la reacción que tuvo el mandatario con la designación de Fredy Erazo como magistrado del Tribunal Electoral del Estado de Puebla (TEEP), que se la atribuyó al senador Armenta, se podría esperar un rechazo o hasta uno de sus clásicos coscorrones contra el senador.
Contra todo pronóstico, el mandatario dio el visto bueno a las aspiraciones de Armenta, pues dijo que enriquece el proceso interno para elegir al mejor candidato.
Y fue más allá al decir que no va a vincular al senador con el peligroso narcomenudista, Christian N, alias “El Grillo”.
Esto a pesar de que días anteriores exhibió la relación entre Armenta y Fredy Erazo, este último, abogado del delincuente.
“Yo no vinculo al senador Armenta con nada de esto, pero todo lo demás tiene que acreditarse”, sentenció.
El senador también guardó la espada que desenfundó en 2019 y aseguró que su aspiración no es ninguna confrontación contra Barbosa.
Incluso dijo que buscará acercamiento con todos los aspirantes, incluida la actual presidenta municipal de Puebla, Claudia Rivera, y el presidente del Congreso, Gabriel Biestro.
Este último, el “delfín” del gobernador.
¿Podría haber un cambio de último momento si al Coordinador de los diputados de Morena en el Congreso local no le dan los números para garantizar el triunfo en la capital?
Recordemos que en la elección extraordinaria de 2019 Morena perdió en la capital del estado y los municipios conurbados.
Los que toman las decisiones en el partido lo tienen claro.
Otro factor es que Miguel Barbosa ha reconocido públicamente que no buscará otro cargo después de la gubernatura.
A diferencia del extinto Rafael Moreno Valle, no requiere de un incondicional en la capital para construir una plataforma política en 2024.
Como buen gobernador, buscará que sus cuentas públicas no sean una sombra para su retiro y eso lo puede negociar tranquilamente con Armenta, que seguramente buscará la gubernatura en 2024.
Como dice Barbosa, “le interesan todos los cargos”.
Habrá que esperar qué dicen las encuestas, esas que nadie conoce, para ver a quién veremos en la boleta.
Mientras tanto, que cierren la llave de gas en Morena porque Armenta llegó fumando.
Hasta la próxima.
Twitter:Juarez_VH
Facebook: Hugo Juárez
Correo: v.hugojuarez.h@gmail.com
